Las medias de compresión se utilizan para ayudar a mejorar la circulación sanguínea en las piernas, de manera que eviten el riesgo de alguna trombosis, aparición de úlceras o varices en la piel.
Estas medias ofrecen compresión graduada, esto quiere decir, que quedan más ajustadas en el área del pie y tobillo y se aflojan a medida que suben en la pierna.
Aprender cómo ponerte medias de compresión, muchas veces es complicado, debido a que son difíciles de colocar.
Por eso, te daremos un truco para poner medias de compresión:
- Utilizar las medias de compresión a primera hora de la mañana
Al despertar en la mañana, las piernas han estado en posición horizontal o levantadas de forma ligera.
Y es muy probable que las piernas no estén tan inflamadas como podrían estar a medida que va pasando el día.
Esto hará que sea más sencillo colocarte las medias de compresión. Trata de elevar las piernas al dormir, apoyando los pies en una almohada.
También, inclina de manera muy ligera hacia arriba la base inferior del colchón, colocando un trozo de madera de 5×10 cm debajo del colchón.
- Espolvorear un poco de talco en las piernas
Al tener un poco de humedad en las piernas, es muy probable que no logres subirte las medias de compresión.
Espolvorear un poco de talco en los pies y en las pantorrillas para absorber el exceso de humedad será de gran ayuda.
- Meter la mano en la media y tomar la punta donde quedan los dedos
Una de las maneras más fáciles de colocarte las medias es poner al revés la parte superior de la media.
Dejar que la punta de la media con el lado derecho hacia afuera, meter la mano en la media y agarrar la punta.
- Bajar la parte superior de la media por alrededor del brazo
Toma la punta donde quedan los dedos para que se conserve con el lado derecho hacia fuera mientras bajas la parte superior de la media sobre el brazo. Quedando la parte superior al revés.
- Tirar de la media para retirarla del brazo
Desliza con mucho cuidado la media para retirarla del brazo, de manera que la parte superior se mantenga al revés, mientras la punta se encuentra lista para colocar el pie.
- Sentar a un lado de la cama o en una silla
Ponerte las medias de comprensión consigue ser difícil, en especial si tienes dificultades para alcanzar los pies.
Tratar de sentarte a un lado de la cama o en una silla para que puedas agacharte para alcanzar los pies.
- Guantes de goma o de látex
Al utilizar guantes, será más sencillo agarrar las medias para poder subirlas. Escoge unos guantes de látex como los que suelen usar los médicos o unos parecidos. Los guantes que se utilizan para lavar los platos también sirven.
- Colocar los dedos del pie en la media
Deslizar los dedos del pie en el extremo de la media y alinearlo de manera que la punta de la media quede recta y uniforme.
- Subir la media al talón
Mientras los dedos de los pies mantienen la parte inferior de la media en el lugar correcto, sube la parte inferior de la media en el talón de modo que el pie quede dentro de la media.
- Deslizar la media por la pierna
Subir la media con las palmas de las manos hasta que la pantorrilla quede toda cubierta. La parte superior de la media que está al revés rodará hacia arriba quedando al derecho.
Conseguirás agarrar mejor las medias utilizando los guantes que con las manos descubiertas.
No debes tirar de la parte superior de la media para subirla por la pierna, porque es muy probable que se rompa.
- Ajustar la media al subir
Asegurarte de mantener la media recta y lisa mientras se sube por la pantorrilla, alisando las arrugas mientras lo haces.
Si utilizas las medias de compresión hasta la rodilla, estas deben llegar al punto que estén 2 dedos por debajo de la rodilla.
Sin embargo, algunas medias de compresión llegan hasta la parte superior del muslo.
- Rehacer el mismo procedimiento con la otra pierna
Si el médico ha recetado unas medias de compresión para ambas piernas, debes seguir estas mismas instrucciones para ponerte la media en el pie.
Trata que ambas medias lleguen a la misma altura. Algunas recetas indican que solo utilices una media de compresión en alguna de las piernas.
- Utiliza las medias de compresión todos los días
Si el médico recomienda utilizar medias de compresión para mejorar la circulación sanguínea, es posible que tengas que usarlas todos los días.
De lo contrario, podrá ser difícil mantenerlas en los pies. Las medias de compresión deben quitarse todas las noches antes de acostarse a dormir.
- Usar un calzador
Si presentas dificultades para alcanzar los pies o colocarte las medias, será útil utilizar un calzador, ya que este es una estructura que se asemeja a la forma del pie.
Poner la media sobre el artefacto y deslizar el pie. Después, quitar el artefacto y la media quedará colocada en el pie de forma correcta.
- Elevar los pies
Al presentar dificultades para ponerse las medias de compresión porque las piernas o los pies están inflamados, debes tratar de elevar los pies por encima del corazón durante 10 minutos.
Es más práctico acostarse en la cama con los pies apoyados en una almohada.
¿Cuándo usar medias de compresión?
Antes que todo, debes conocer que las medias de compresión tienen una función tanto terapéutica como preventiva antes los problemas circulatorios venosos.
A continuación, se mencionan las situaciones para saber cuándo usar medias de compresión:
- En caso de edemas.
- Luego de cirugías venosas.
- Mujeres embarazadas ante aparición de varices.
- Personas que pasan muchas horas quietas por simple rutina o por trabajo, bien sea de pie quietos o sentados.
- Aparición de varices y arañas vasculares.
- Media preventiva para la aparición de úlceras y trombosis.
- Tratamientos de escleroterapia.
Tipos de medias de compresión
Es importante conocer la utilidad de los calcetines de compresión, de manera que, existen varios tipos en función del tratamiento que se esté realizando, además de variedad de colores y tallas.
Los tipos de medias de compresión se diferencian en dos grandes grupos:
Compresión ligera o normal
Las medias de compresión ligera o normal se recomiendan para mejorar la circulación de la sangre.
Por lo general, en los casos de piernas cansadas, personas que pasan mucho tiempo sentados y para mujeres embarazadas.
También, son ventajosas como método de prevención de varices o existencia de pequeñas arañas varicosas.
Compresión fuerte
Se usan en los casos de tratamientos de enfermedades venosas graves y siempre bajo la supervisión del médico.
Las medias de compresión fuerte consiguen ser de tamaño largo o corto y su presión varía de fuerte a extra fuerte.
Son recomendadas para las dolencias más complicadas como úlceras varicosas, varices severas u otras enfermedades que comprometen en un grado mayor la circulación sanguínea de los pies y piernas.
Pero, si nos basamos en la funcionalidad, encontramos otros tipos distintos:
Medias de descanso
Las medias de descanso también son cortas o largas, brindando una presión de leve a moderada.
Su diseño garantiza un descanso en las piernas y otorga un alivio a las molestias de varices en grado leve.
Estas medias son perfectas para esas personas que pasan mucho tiempo de pie o sentadas y sufren de un cansancio recurrente en las piernas.
Medias de compresión para varices
Por lo regular, las medias de compresión para varices son largas, es decir, que van desde el pie hasta la parte media del muslo haciendo presión de moderada a fuerte.
Permiten que la sangre fluya de manera apropiada y que no se estanque en las extremidades.
Medias para la circulación
Brindan una presión moderada y logran ser cortas o largas. Las medias para la circulación son ideales para otorgar sensación de confort a las piernas mientras ayudan a mejorar su flujo sanguíneo.
Al mismo tiempo, permiten disminuir los riesgos de padecer enfermedades circulatorias.
Medias de compresión post quirúrgicas y anti embolicas
Las medias de compresión post quirúrgicas y anti embolicas brindan presión moderada y son tanto cortas como largas.
Su nivel de presión está probado clínicamente para garantizar un mejor flujo sanguíneo en las extremidades luego de una intervención quirúrgica y disminuir el riesgo de una distensión venosa.
Consejos para un buen mantenimiento de las medias
Las medias de compresión son muy delicadas, por lo que es importante saber cómo darles el cuidado que requieran para que así duren y no se estropeen.
Estos algunos consejos para un buen mantenimiento de las medias:
- ¿Cómo lavarlas?
Algunas medias pueden lavarse a máquina con el programa de prendas delicadas y con agua tibia (máximo 40°).
Mientras que otras tienen que lavarse solo a mano con jabón neutro y a menos de 30°.
Es recomendable leer siempre las instrucciones de lavado del producto para evitar que estas se dañen.
Usa detergente sin suavizante, evita por completo la lejía y las prendas deben lavarse siempre al revés.
En la red de lavado es aconsejable utilizar una red para proteger las partes más delicadas de las medias, por ejemplo, la banda de silicona.
Al usar medias largas es importante que la banda de silicona no tenga contacto con pomadas, cremas, disolventes o lociones, así como con fuentes de calor porque podrían reducir la adherencia.
Igual, si utilizas pantys, evita que se mezclen con aceites o cremas, ya que deterioran las fibras de lycra, haciéndolas más débiles y menos elásticas.
Estas deben lavarse cada dos días de uso o a diario.
- ¿Cómo secarlas?
Las medias de compresión deben secarse al aire libre, pero sin exponerse al sol ni a otros tipos de fuentes de calor.
Algunas de ellas pueden secarse de forma muy suave en la secadora y otras medias no, así que debes consultar siempre la etiqueta antes de hacerlo.