Las medias son muy útiles en ciertas temporadas del año, las cuales son perfectas para completar un outfit.
Estas son el complemento perfecto para cualquier situación, porque estilizan las piernas y unifican la piel, aparte de camuflar cualquier imperfección.
Sin embargo, las medias siempre están expuestas a romperse, ya sea por el uso, la calidad o el cuidado.
Hay algunas medias que no se rompen, pero hay que saberlas identificar para no elegir las que son de mala calidad.
Existen diversos trucos que se pueden seguir para evitar que las medias se rompan y duren por más tiempo.
Asegurarse de que tengan puntera reforzada
Si quieres pantis o medias más resistentes, entonces hay que asegurarse de que tengan puntera reforzada y la entrepierna.
Esto significa que esas zonas tienen dos capas de costura, así que son más resistentes y, por lo tanto, menos propensas a rasgarse.
También, prueba usando calcetines finos debajo de los pantis, dependiendo del calzado que lleves, para que actúe como una barrera entre la tela y las uñas.
Usar crema hidratante
Siempre se debe cuidar muy bien de los pies, y mantener hidratada la zona del talón, ya que es uno de sitios que más tienden a resecarse y es propensa a sufrir de callosidades.
No debes olvidar usar crema hidratante y dejar que seque bien para mantener la piel suave y tersa para evitar que la media se rompa al colocarse.
Congela las medias
El truco de congelar las medias es uno de los más efectivos. Al comprarlas pásalas por agua, guardarlas en una bolsa de plástico y meterlas en el congelador.
Debe dejarlas ahí por 24 horas, luego sácalas y descongélalas en agua tibia, sécalas al aire y estarán listas para ponerse.
Pero, al estrenarlas, aplica un poco de laca en el talón y las puntas de los dedos, ya que son áreas muy delicadas.
Lavarlas a mano
Para una mayor duración de las medias es esencial saberlas cuidar, por lo que es importante lavarlas a mano con jabón neutro y agua tibia.
Si no tienes tiempo para hacerlo a mano, entonces introdúcelas en la lavadora, pero deben ir en una bolsa a parte del resto de la ropa. Así, lograrás evitar que las medias se rompan.
Beneficios de lavar la ropa a mano:
- Ahorro de energía: Lavando la ropa a mano, se ahorra en el consumo de energía eléctrica, ya que no se utiliza una lavadora que requiere electricidad.
- Ahorro de agua: Lavando la ropa a mano, se puede controlar la cantidad de agua que se utiliza, lo que puede resultar en un ahorro de agua en comparación con una lavadora que utiliza una cantidad fija de agua para cada ciclo.
- Mayor cuidado de la ropa: Al lavar la ropa a mano, se puede tener más control sobre el proceso de lavado y se puede evitar que la ropa se estire o se encoja, lo que puede suceder en una lavadora.
- Eliminación de manchas: Al lavar la ropa a mano, se puede prestar más atención a las manchas y tratarlas de manera específica antes de lavar toda la prenda, lo que puede resultar en una eliminación más efectiva de las manchas.
- Ahorro de dinero: Si no se tiene una lavadora, lavar la ropa a mano puede ser una forma económica de mantener la ropa limpia.
Usa una bolsa de lavado
Una bolsa de lavado es un accesorio práctico que te ayuda a proteger tu ropa delicada durante el lavado en la lavadora. Aquí te explicamos cómo utilizar una bolsa de lavado correctamente:
- Separa la ropa delicada: Antes de comenzar a lavar tu ropa, separa aquellas prendas delicadas que requieran protección durante el lavado, como las medias, la ropa interior, la lencería, etc.
- Coloca la ropa en la bolsa: Una vez que tengas separadas las prendas delicadas, colócalas dentro de la bolsa de lavado. Es importante que no las amontones demasiado, ya que necesitan espacio para moverse durante el lavado.
- Cierra la bolsa: Una vez que hayas colocado la ropa en la bolsa, ciérrala asegurándote de que el cierre esté bien fijado. De lo contrario, la ropa podría salirse de la bolsa durante el lavado.
- Lava la ropa: Coloca la bolsa de lavado dentro de la lavadora y programa el ciclo de lavado correspondiente para la ropa que hay dentro. Utiliza un detergente suave y agua fría.
- Seca la ropa: Una vez que haya terminado el ciclo de lavado, retira la bolsa de la lavadora y saca la ropa. No la seques en la secadora, ya que esto puede dañar las fibras y provocar que se desgasten más rápido. En su lugar, cuelga la ropa para que se seque al aire libre.
Las bolsas de lavado son fáciles de utilizar y protegen tus prendas delicadas durante el lavado en la lavadora. Además, te permiten lavar varias prendas a la vez sin temor a que se enganchen o se dañen. Recuerda siempre seguir las instrucciones de lavado y cuidado de cada prenda y no llenar la bolsa de lavado en exceso para evitar dañar las fibras.
Usa un detergente suave
Usar detergentes suaves para lavar la ropa tiene varios beneficios para la salud de tus prendas, así como para la salud de la piel y el medio ambiente. Aquí te explicamos algunos de los beneficios más importantes:
- Protege las fibras de la ropa: Los detergentes suaves están diseñados para no dañar las fibras de la ropa, lo que significa que tus prendas durarán más tiempo y se mantendrán en mejor estado. Esto es especialmente importante para la ropa delicada, como la lencería y la ropa interior, que puede dañarse fácilmente con detergentes fuertes.
- Reduce la irritación en la piel: Los detergentes suaves son menos propensos a causar irritación en la piel, lo que es especialmente importante si tienes piel sensible o propensa a alergias. Al elegir un detergente suave, puedes reducir la probabilidad de sufrir erupciones o picazón en la piel.
- Mejora la calidad del agua: Los detergentes suaves no contienen químicos agresivos que puedan dañar el medio ambiente o contaminar el agua. Al elegir un detergente suave, estás haciendo tu parte para proteger el medio ambiente.
- Ahorra dinero: Los detergentes suaves son más económicos a largo plazo, ya que te permiten lavar la ropa con menos frecuencia y reducir la cantidad de productos de cuidado de la ropa que necesitas comprar.
En resumen, usar detergentes suaves para lavar la ropa es una excelente manera de proteger tus prendas y tu piel, mientras cuidas el medio ambiente y ahorras dinero. Asegúrate de leer las etiquetas de los productos para elegir un detergente suave que sea adecuado para tu tipo de ropa y tu piel.
